Arreglos y dirección musical: Juan Acuña
Guitarra flamenca: Niño de Pura
Bajo eléctrico: Manuel Nieto
Percusión: Juan Ruiz
Piano, teclados y programación: Juan Acuña
Trompeta: José Manuel Bernal
Trombón: Juan José Puntas
Flauta y saxo: José Ramón Ramos
Cuerdas: Orquesta de Cámara de Nervión
Palmas y palillo: Cuadro flamenco de J. Joaquín de Pura
Fotografía: E. Saenz
Técnicos de sonido: Abelardo Jiménez y Luis Mangas
Grabado en: Alfaguara estudios (Sevilla)
Masterización: Alfadic
Diseño gráfico: Rafael Iglesias
Es una producción DISCOS SENADOR para su sello COLISEUM
AUTORES:
1 A caballo por la feria
(Aurelio Verde/J. M. Moya)
-Tengamos la fiesta en paz
(J. S. Morales/J. M. Moya)
2 Lo mismo te pasa a ti
(J. S. Morales/J. M. Moya)
-Gaviota de mi querer
(Aurelio Verde/J. M. Moya)
5 Como un altar de alegría
(Aurelio Verde/J. M. Moya)
-Sevilla y Huelva a la vez
(Hnos. M. Bizcocho/J. M. Moya)
6 Ahí está Sevilla
(Aurelio Verde/J. M. Moya)
-Triana
(Manuel Jalón/J. M. Moya)
7 Al otro lado del mar
(J. S. M orales/J. M. Moya)
-Las cuadrillas
(J. S. M orales/J. M. Moya)
8 Hay siempre una canción
(J. S. M orales/J. M. Moya)
-El reloj de la vida
(J. S. M orales/J. M. Moya)
9 La hora de tu amor
(J. S. M orales/J. M. Moya)
10 Palabras que se dicen por la arena
(Aurelio Verde/J. M. Moya)
11 Peregrino
(Manuel Jalón/ J. M. Moya)
12 Señora
(J. G. de Queved o/J. M. Moya)
13 Es tiempo de cacería
(Aurelio Verde/J. M. Moya)
14 Quien te pudiera llevar
(Paulino González/ J. M. Moya
LETRAS:
A CABALLO POR LA FERIA
I
El sombrero de ala ancha,
y chaquetilla bien puesta,
terciopelo en la solapa
y camisa sin chorrera.
Así viste el andaluz
cuando a caballo pasean
bajo un cielo de abril puro
en una tarde de feria.
II
En su silla de amazona
se sienta la gracia entera,
que “pa” llevar el caballo
le sobra con una espuela.
Por eso viste una falda
que es como una flor abierta.
Así visten las señoras
cuando a caballo pasean
derramando señorío
en una tarde de feria.
TENGAMOS LA FIESTA EN PAZ
I
Tú vas diciendo imprudente
que yo no soy de tu altura
como si en ser buena gente
tenga que ver la estatura...
II
Por destacar tú serías
del gavilán la paloma
el Cristo en la cofradía
o el Padre Santo de Roma...
Estribillo:
Tengamos la fiesta en paz
que aquí el que mas y el que menos,
tengamos la fiesta en paz
que aquí el que mas y el que menos
tiene por donde callar.
LO MISMO TE PASA A TI
I
Se está secando una rosa
cerquita de un manantial
aunque es la flor más hermosa
que habita en aquel rosal...
Lo mismo te pasa a ti:
se está secando tu rosa
y no me la das a mí.
II
Qué triste está una amapola
en medio de algún trigal
aunque, a pesar de estar sola
le gusta la soledad...
Lo mismo te pasa a ti:
te pasas la vida sola
por no decirme que sí.
GAVIOTA DE MI QUERER
I
Me baño contigo, niña,
cuando la tarde se vaya;
aunque tu madre nos riña,
mira el sol que por la playa,
tan alcahueta, nos guiña.
II
Como esa torre que encierra
en la arena su pasado…
soy el viento enamorado
que sigue pidiendo guerra
cuando pasa por tu lado.
Estribillo:
Gaviota de mis mares
tienes nombre de mujer,
la marinera del aire,
la reina de mi querer…
¡no se lo digas a nadie!.
COMO UN ALTAR DE ALEGRÍA
I
Luna, luna
te has vuelto rociera…
¡qué oportuna
plateando veredas!.
Ay, la luna
que por el cielo rueda.
II
Los caminos
que van a la marisma
son destinos
de arena cristalina…
Ay, caminos
con la cigüeña encima.
Estribillo:
El campo entero
es un altar de alegría
alumbrando poesía,
cuando pasa el rociero
y siembra la romería.
SEVILLA Y HUELVA A LA VEZ
I
Si el alma pudiera ser
cuando se duerme la cava,
fragua que sueña volver
a ser quejío en Triana.
Y ser fandango también
sentencia que en su entrañas
Alonso ha visto nacer.
II
Si el alma pudiera ser
de la Giralda campana
de viejo bronce la piel
como una reina gitana…
Y ser marisma también
pisada que se derraman
soñando volverla a ver.
Estribillo:
Si el alma pudiera ser
“simpecao” en el Rocío
y en Abril: rojo clavel,
sentirse mar en el río
Sevilla y Huelva a la vez.
AHÍ ESTÁ SEVILLA
I
Donde la sombra tiene
una luz diferente
y las calles se estrechan
y te hablan las fuentes.
Donde al río le gusta
recrear su corriente.
II
Donde el aire es un grito
con dolor de azahares
y mecen los latidos
un compás de cantares.
Donde la primavera
lleva un lirio en la sangre.
Estribillo:
Ahí está Sevilla
tierra por donde siempre bendita,
que el tiempo no le hace daño
y se pone más bonita
conforme pasan los años.
TRIANA
I
Mi madre tuvo la gracia
de echarme al mundo en Triana…
en una casa de arte
muy cerquita de Santana
blanca de cal y de luna
con su fuente de agua clara.
II
Mi cuna cantes de fraguas,
escapularios de plata
y en la raíz de mi alma
estrella de la mañana
el Cachorro y la Esperanza
mis vecinos de Triana.
Estribillo:
Pero el viento de los años
borró mi camisita blanca
y a mi me muerden las ganas
antes que el cielo me llame
de volver a mi Triana.
AL OTRO LADO DEL MAR
I
Lloraba un acordeón
en las penumbras de un bar,
sonaba a réquiem por su amor
que nunca pudo cruzar el mar....
II
En aquel puerto escribió
una historia sin final,
hoy sólo tiene su acordeón
que le acompaña en su soledad....
Estribillo:
Marinero,
si la encuentras, marinero,
al otro lado del mar,
cuéntale que yo la quiero
y no la puedo olvidar.
LAS CUADRILLAS
I
La luna en "las Palmillas"
saluda al alba
y ya van las cuadrillas
para la escarda ...
Estribillo:
Los arrozales
despiertan con el duende
de sus cantares.
II
¡Anda, manigerito,
dame tarea,
que me atrevo solito
con lo que sea!.
Estribillo:
iQue en trabajando
que me da igual en la escarda
que replantando!..
HAY SIEMPRE UNA CANCIÓN
I
El son de una canción
me habló de nuestro ayer
y del primer amor
que un día se nos fue....
II
Recuerde aquel rincón
bailando a media luz,
viviendo con pasión
la hermosa juventud.
Estribillo:
Detrás de un gran amor
que tuvo su final,
hay siempre una canción
que va directa al corazón
de aquél que quiso más.
EL RELOJ DE LA VIDA
I
Lamento que te perdí
por no pedirte perdón,
pues nunca reconocí
que tuve la culpa yo
y ahora no vivo sin ti...
II
Me dio recuerdos de ti
la lluvia sobre el cristal
y en un instante volví
en mi memoria al lugar
donde yo te conocí…
Estribillo:
Y ahora,
Ahora cuanto daría
por retornar a esa edad,
pero el reloj de la vida
no quiere volverse atrás.
LA HORA DE TU AMOR
I
Yo siempre presumí de tu amistad
querida amiga mía
y nunca sospeché que era algo más
lo que por mí sentías...
II
La inercia de la vida nos llevó
por sendas diferentes,
yo siempre naufragando en el amor
y tú esperando siempre.
III
Por fin me he dado cuenta de mi error
después de tantos años,
bien sabes que no ha sido mi intención
llegar ha hacerte daño...
IV
¿Por qué no me dijiste que era yo
el hombre que tú amabas?,
¿Por qué no me contaste, corazón
que me necesitabas?...
Estribillo:
Y hoy cuentas que era yo
aquél por quien sufría
tu noble corazón…
que tarde me ha llegado, amiga mía
la hora de tu amor.
PALABRAS QUE SE DICEN POR LA ARENA
I
Palabras que se dicen por la arena
en los campos del Rocío,
un paso detrás de otro
y por delante el camino.
Palabras que se dicen por la arena
y llegan hasta el mismo corazón,
!sí rociera es mi huella
más rociero soy yo!
II
Me pierdo caminando entre pinares
por una senda cualquiera
y siempre encuentro amapolas
que hablen de la primavera.
Palabras que se dicen por la arena
y rompen el silencio sin querer
!yo quisiera ser camino
y caminante a la vez!.
III
La vara de eucalipto va conmigo
como buena compañera
traigo abierto los sentidos
y el corazón por bandera.
Palabras que se dicen por la arena
y nunca más se vuelven a escuchar…
¡me gusta la noche oscura
porque siembra claridad!
IV
La mañana se escapa clareando
por esas lindes del coto
y un olor a monte nuevo
viene andando con nosotros.
Palabras que se dicen por la arena
y sólo aquí se pueden repetir
!lo ancha que es la marisma
y cabe dentro de mi!.
PEREGRINO
I
Peregrino que caminas
detrás de tu “simpecao”
llevas baja la mirada
tu cuerpo ya está “cansao”
se da cuenta el carretero
y a los bueyes te ha parao.
II
Peregrino en silencio
que en voz baja vas rezando
el crujir de la carreta
y el carretero mandando,
son los sones de un camino
que tu alma va alegrando.
III
Tus pisadas van dejando
las huellas del sufrimiento
tu promesa vas cumpliendo
a golpe de sentimiento
y tus blancas alpargatas
las arenas van tiñendo.
IV
Siempre lleva una sonrisa
"pa" el que se acerca a tu “lao”,
las fatigas de tu cuerpo
en los adentros guardaos
que sufrir, nadie te vea
ni siquiera el “simpecao”.
Estribillo:
Son simientes tus andares
que van sembrando la fé
por veredas y senderos…
qué grande tiene que ser
tu corazón rociero.
SEÑORA
I
Necesito ver tus ojos,
Señora…
notar en tus labios rojos
esa sonrisa de aurora…
y que tu Pastor divino
me dé fuerzas y alegría
para poder, cada día,
ir haciendo mi camino.
II
Yo soñé con este instante
Señora…
y al tenerte ahora delante
quisiera parar las horas
también sé que has “deseao”
que pasaran las semanas
y llegara esta mañana
para mirarme a tu “lao”.
III
Con mi alegría y mi pena
Señora…
me vine por las arenas
antes de asomar la aurora
y al rezarte con mi canto
y al decirte mi cariño
me ha “sonreío” tu Niño
y en mis ojos brotó el llanto.
IV
Soy rociero y cristiano
Señora…
y el Pastor me da en su mano
esa gracia bienhechora
“pa” sembrar amor sincero
mientras me dure la vida
y será mi despedida
gritar que fui rociero.
Estribillo:
Acércate un poco,
ven Consoladora,
porque si te toco
yo me vuelvo loco,
Señora.
ES TIEMPO DE CACERÍA
De cacería,
con los amigos de siempre…
yo me voy de cacería,
y en la venta Aguamaria
el primer café caliente
es de noche todavía.
I
El patio del caserío
los hombres con chaquetón,
huele a miga y aguardiente
y a leña hecha carbón.
II
En los perfiles del monte
se cuaja la “rociá”
y los bandos de perdices
cruzando de aquí “p'allá”.
III
“Arrimaíto” al lentisco
con la pata “levantá”
tu perro se está diciendo
que la guerra va a empezar.
IV
En ese visto y no visto
que aparece la perdiz
tú te encaras la escopeta
y el mundo entero es “pa” ti.
Estribillo:
Despierta el campo y se estira
la madrugada a poniente,
el invierno se respira
y el cazador que lo siente
mirando al cielo suspira.
QUIEN TE PUDIERA LLEVAR
I
Bajo un cielo de estrellas y luceros
el lunes de “madrugá”
con mi fe de sencillo rociero
!Quién la pudiera llevar!.
II
Cuando viene su paso hacia delante
y luego se va hacia atrás
aunque fuera tan solo breve instante
!Quién la pudiera llevar!.
III
Brilla el sol en la plata de su palio
al pasar por el real
y mientras brotan salves los labios
!Quién la pudiera llevar!.
IV
Al pasar la Virgen a mi vera
quiero tocar su varal…
y luego unos segundos tan siquiera
!Quién la pudiera llevar!
Estribillo:
!Quién la pudiera llevar!.
!Quién la pudiera sentir!
sobre los hombros "posá"
!Ay, Blanca Paloma, a ti,
quién te pudiera llevar!.
