Singles:
Requiebros
Gitana guapa
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CRÉDITOS:
Arreglos y dirección musical:
Jesús Glück
LETRAS:
REQUIEBROS
I
Giralda de Sevilla,
mantilla
Torre del Oro.
Donde los maletillas,
mantilla,
juegan al toro.
Con un capote grana,
campana,
juegan al toro,
y lo ve la ventana,
campana,
de un patio moro.
Llenito de claveles,
quereres,
dicen a coro
-Sevilla y sus mujeres,
quereres.
¡Vaya un tesoro!-.
II
Ruedo del Baratillo,
Palillos
de rubio albero,
donde sueña un chiquillo,
palillos
con ser torero.
Y la luna lo vela,
cancela,
por los cerrados
y enciende una candela,
cancela,
junto al “vallao”.
Y una madre llorando,
rezando
de noche y día
y el chiquillo retando,
rezando
a la corría.
III
Mi Virgen marinera,
velera
es de Triana.
Gitana canastera,
velera
rosa temprana.
Que cuando pasa el puente,
la gente
rayando el día,
se lleva la corriente,
la gente
las penas mías.
Y dice una saeta,
maceta
viva Triana
que es mocita coqueta,
maceta
de Santa Ana.
IV
Salió la Macarena,
morena
de madrugada
y la luna se llena,
morena
con su mirada.
Y Sevilla se asoma,
paloma
a sus cristales
le hacen una corona,
paloma
con sus rosales.
La mecen con esmero,
salero
entre el gentío
y un viva y un te quiero,
salero
lleva “prendío”.
GITANA GUAPA
I
Dame la flor que llevas
gitana guapa,
que quiero yo lucirla
en mi solapa.
Anda salero
dame la flor que llevas
prendía en tu pelo.
II
Mi corazón al verte
siempre se para,
que son muchos los duendes
que hay en tu cara.
Si yo pudiera
decirte toas las cosas
que yo quisiera…
III
De amores y tristezas
tengo yo penas
“desgraciao” del hombre
que no las tengas.
Pero cantando estas
penitas negras
voy olvidando.
IV
Rezándole a la Virgen
pensaba en ti;
la Virgen me miraba
decía que sí.
Soñé aquel día
que por querernos tanto
nos bendecía.
TIENE UN CUCHILLO
I
La Giralda es una fuente
que derrama señorío,
es novia de la corriente
y de las aguas del río.
Tiene un cuchillo,
blanco y celeste.
En los verdes arriates
el Giraldillo travieso
besa a las rosas del parque.
II
Una torre sin campanas
capricho de algún rey moro
se duerme frente a Triana
sobre su lecho de oro.
Tiene un cuchillo,
blanco y celeste.
La luna en los olivares
Derrama conchas de espuma
por las aristas del aire.
III
Se ven desde la Giralda
llorar a los limoneros,
la bandera roja y gualda
el brillo de los toreros.
Tiene un cuchillo
blanco y celeste.
Por el mar de mis amores navegan
voces ocultas
en lejanos horizontes.
IV
Ancló su barca de oro
en los juncos de la orilla
la torre tiene un tesoro
que se lo guarda Sevilla.
Tiene un cuchillo
blanco y celeste.
Mirador, luz y ventana
en su cuerpo se estremecen
los suspiros de Triana.
GALLARDEAN LAS BANDERAS
I
En la Feria de Sevilla
gallardean las banderas.
Cuando pone mi chiquilla
caseta de buñolera.
Tratantes y ganaderos
tomaban el chocolate
y yo besaba tus labios
más dulces que el piñonate.
II
A mí no me importe nada.
que no me quieran tus gentes.
Porque me sobran reaños
y corazón “pa” quererte.
Déjalo que nos critiquen
las lenguas “murmuraoras”
ya verás cuando repiquen
las campanas de la boda.
III
A las tres de la mañana
válgame un Divé del cielo.
Me diste un beso en la boca
que me supo a caramelo.
“Pa” que quiero más consuelo
gitana del alma mía
que los besos de tu boca
que es una confitería.
IV
La feria se fue llenando
de alegrías y de colores.
Con niñas de quince años
que huelen como las flores.
Y fregando los peroles
hay una rosa de mayo
que acaba con las que vienen
por la feria a caballo.
LA LEYENDA DE LA LÍRIO
I
La leyenda de la Lirio
vive en Cádiz todavía…
la cuentan los marineros
cantando por alegrías.
Volando por la bahía
vienen copias y suspiros
y esa pena de aquel día
en que se marchó la Lirio.
II
En un barquito de espuma
se fue de Cádiz la Lirio
y se la han puesto las sienes
“moraítas” de martirio.
Maldita sea la hora
que a la Bizcocha han “pagao”
cincuenta monedas de oro
por aquél lirio “morao”.
III
Esta copla de la Lirio
por el agua se ha “extendío”
y ha “llegao” hasta Sevilla
por las orillas del río
desde el puente de San Telmo
aquel lirio “deshojao”
rodando de boca en boca
por Sevilla lo han “llevao”.
IV
El mar rizaba sus velas
desde Cádiz hasta Almería
y aquel novio centinela
aún la llora en la bahía
y a las claritas del día
repetía en su delirio
qué dolor de novia mía
¡ay! qué pena de la Lirio.
Y YO ESPERANDO
I
Si en el mar de la vida
soplaran otros vientos,
quizás a tu barquilla
la empujen a mi puerto.
II
Los pasos que se alejan
van haciendo senderos.
Caminos de esperanza
con ansias de regreso.
III
Te harán volver un día
las lluvias y los vientos,
en busca del abrigo
seguro de mí techo.
IV
Cuando se agote el cauce
de tantos arroyuelos…
Acuérdate del agua
del pozo de mi huerto.
Estribillo:
Y yo esperando
con las manos abiertas
no sé hasta cuándo…
de par en par las puertas,
sigo esperando.
EL PUERTO DEL OLVIDO
I
Tengo un velerito anclado
en el puerto del olvido,
todo de blanco pintado
para que vengas conmigo.
Y veas las gaviotas
cuando componen sus nidos
en lo alto de las rocas.
II
Mis males los llevo dentro
y no se los cuento a nadie,
porque a nadie le consiento
que se alegre de mis males.
Pues mis males son tormentos...
que arrastran los temporales
y la furia de los vientos.
III
Esa niña marisquera
que viene marisqueando.
Es mi novia marinera
y ha nacido en San Fernando.
“Alborotaíto” el pelo,
mi duca está consolando.
porque se llama Consuelo.
IV
El amor que yo tenía
se lo llevó la corriente,
y lo enterró en la bahía
sin que se enterara el puente.
Que todo lo chismorrea,
el amor que yo tenía
se lo llevó la marea.
LAS COSAS DEL "GANAO"
I
Los toros de las corrías
claman pidiendo venganza,
no quieren perder la vía
en la arena de las plazas.
Y se inventan unas leyes
que no saben los vaqueros
pero los espulgabueyes
se lo cuentan al sendero.
La marisma chismorrea
a las pitas del “vallao”
y todo el campo se entera
de las cosas del ganao.
II
La luna se fue a dormir
detrás de los eneales,
y el sol empezó a salir
para dorar los trigales.
Una tormenta enlutada
puso un sombrajo en el cielo
asombrando a la manada
que descansaba en el suelo.
Un rayo mató a una cierva
que dormía con su cría
y a los menos cinco leguas
las vacas fueron “juías”.
III
Cuando llegan los calores
llega el sueño del potrico
y se tiende entre las flores
donde zumban los mosquitos.
La yegua lo vela vela
y a los tábanos espanta,
volando la canastera
mientras la chicharra canta.
Un toro negro zaino,
ha cruzado las chumberas,
se hizo el amo del camino
señor de la carretera.
IV
En mayo está la marisma
toda florecida y hermosa,
la amapola no es la misma
y huelen mejor las rosas.
Las novíllas juguetean
empezando sus amores
y un cuatreño reburdea
mientras suspiran las flores.
-¿Adonde vas jardinero?-
pregunta una gitanilla.
-Yo quiero ser el primero
en contárselo a Sevilla-.
SEVILLANAS MARISMEÑAS
I
Al verde en la marisma
no hay quien lo iguale,
cuando en junio verdean
los arrozales.
Y en lejanía
se ve tu santuario
Paloma mía.
II
Por los lucios del coto
la alondra trina,
y rozan los canales
las golondrinas.
Bellos horizontes
de la Blanca Paloma
Reina de Almonte.
III
Cuando cae la tarde…
mugen los toros,
y los ciervos levantan
nubes de oro.
Canela fina
jinetes a caballo
por la rocina.
IV
Por el coto del Rey
ya viene el Alba
la vienen anunciando
los Estenazas.
Aires gitanos
le sacan a sus gaitas
los dos hermanos.
LAMENTO GITANO
I
Duermen…
Duermen los gitanos
bajo los olivos,
con manto de estrellas
y aroma de lirio.
Duermen…
Tres de la mañana,
cinco de la tarde,
duermen las campanas
y los olivares.
Duermen…
Lamento gitano
de profundas leyes
llevan en sus manos
la sangre de reyes.
Duermen.
II
¡Ay!,
¡Ay! la carretera,
¡ay! de los caminos,
¡ay! de las vereas
de los peregrinos.
¡Ay!...
¿Ves aquel rastrejo
junto a los olivos?,
suelta a las colleras
que apuren el trigo.
¡Ay!...
Arde la candela
y el humo parece
a mí niña Ana
cuando se estremece.
¡Ay!.
III
Pena…
Pena de consuelo
mi niña morena,
que amarra su pelo
con una azucena.
Pena…
Mi madre del alma
guapa y canastera,
se mira en el agua
de la torrentera.
Pena…
Mi hermanillo Antonio
sabe una “verea”
que llega del monte
hasta la chumbera.
Pena.
IV
Vente…
Vente “pa” Sevilla,
vente “pa” Triana,
esa gitanilla
que nació en la cava.
Vente…
Mis primos Heredías
los de manzanilla,
cantan en la feria
una seguirilla.
Vente…
Adiós monumento.
Adiós arma mía,
vente de momento
a la vera mía.
Vente.
PALOMA TORCAZ
I
En la “oscuriá”
te brillan los ojos
como el verde “má”…
llenito de “lú”,
un beso en tu boca
me ofreciste tú.
En la “oscuríá”
te brillan los ojos
como el verde “má”.
II
Viniste a mí
quemaba tu aliento
y el agua bebí…
de tu “manantiá"
regalaba amores
tu fuente “embrujá”.
viniste a mí
quemaba tu aliento
y el agua bebí.
III
Paloma “torcá”,
te fuiste volando
para otro “piná”…
donde un nuevo “amó”,
acecha tu vuelo
como un “cazaó”.
Paloma “torcá”
te fuiste volando
para otro “piná”.